Investigadores de la Universidad Estatal de Pensilvania han hallado una relación entre la restricción calórica y el envejecimiento celular, con pruebas de su potencial para prolongar la vida de las personas.
El estudio examinó los telómeros, las "terminaciones" genéticas protectoras de los cromosomas, y su respuesta a la restricción calórica.
Los resultados revelaron que, aunque al principio los participantes perdían telómeros más rápidamente al restringir las calorías, el ritmo se ralentizaba una vez estabilizado el peso.
Esto sugiere que la restricción calórica puede mitigar el envejecimiento celular al reducir el estrés oxidativo y los daños en el ADN de las células.
Los telómeros, que son cruciales para la división y la función celular, se acortan de forma natural con la edad, lo que conduce a la senescencia celular.
Sin embargo, factores como el estrés, las enfermedades y la dieta pueden influir en la longitud de los telómeros y el envejecimiento celular.
Aunque la restricción calórica se ha asociado con la pérdida de peso y la mejora de los marcadores de salud, no es necesario tomar medidas extremas.
Incluso un déficit calórico modesto puede iniciar la pérdida de peso y ralentizar potencialmente el envejecimiento celular.