Los investigadores han examinado las causas biológicas del envejecimiento con la esperanza de ofrecer formas de detener sus signos visibles y las enfermedades relacionadas con la edad. Con el paso del tiempo, nuestras células e incluso nuestros genes se dañan y empiezan a actuar a medida que envejecemos. Los expertos han descubierto dos temas principales en los que se engloban los signos distintivos del envejecimiento: el desgaste y los problemas de eliminación. Los mecanismos de reparación del ADN disminuyen con el tiempo, lo que hace que nuestras células dejen de funcionar correctamente. Las células madre se agotan, lo que contribuye principalmente a los signos del envejecimiento: canas, adelgazamiento y piel menos elástica. La autofagia, el proceso por el que se destruyen los elementos defectuosos de la célula, disminuye con el tiempo, al igual que nuestra capacidad para deshacernos de las células y proteínas malas.