Los infartos de miocardio y los accidentes cerebrovasculares se duplicarán en las próximas décadas debido al calentamiento global, según una investigación publicada en la revista Circulation.
En la actualidad, los infartos de miocardio y los accidentes cerebrovasculares relacionados con el calor sólo representan el 1% de los incidentes.
A medida que aumenten el calor y la humedad, también lo harán los índices de mortalidad. Los más vulnerables son los ancianos y las personas de color.
Las personas mayores y los adultos de raza negra corren un mayor riesgo debido a la mayor prevalencia de diabetes y cardiopatías en estas poblaciones.
Ambos factores afectan a la capacidad del cuerpo para regular la temperatura corporal, especialmente en condiciones de calor extremo.
Se prevé que el riesgo de los adultos de raza negra de sufrir muertes cardiovasculares relacionadas con el calor se triplique de aquí a 2065.
Esto se debe en parte a que gran parte de la comunidad negra de Estados Unidos sufre una falta de inversión en infraestructuras.
Esto significa que, a medida que aumentan las temperaturas, hay pocas instalaciones disponibles para mitigar los efectos, como espacios verdes abiertos o árboles para refugiarse.