Sin duda, los desastres naturales son escenarios complicados para los dirigentes políticos. Cuando las situaciones se descontrolan, todas las miradas apuntan a los gestores públicos, quienes tratan de reaccionar de la mejor manera posible (aunque no siempre lo consiguen).

Entre las diferentes reacciones que se pudieron ver a lo largo del fin de semana, en plena DANA, la de Javier Úbeda Liébana, alcalde de Boadilla del Monte (Madrid), se viralizó rápidamente por las redes sociales. El motivo no tuvo que ver con polémicas, salidas de tono o accidentes, sino que más bien se debió a un contenido simpático o gracioso.

El alcalde, durante la mañana de este lunes, se enfundó su traje de superhéroe (formado por un chaleco impermeable y unas botas de agua), salió de casa, se detuvo ante un cruce inundado y se propuso arreglar la situación.