Alfonso Rojo: "El alcalde Almeida debe montar ya un circuito turístico por las chekas socialistas de Madrid"
- hace 2 años
Hasta aquí hemos llegado. Por chusco que parezca, tenemos que hablar otra vez de ese bodrio llamado Ley de Memoria Democrática, que impulsan Pedro Sánchez y sus compinches.
No les voy a repetir que, cuando se aplique, cerrarán un medio de comunicación como Periodista Digital, por sostener que la II República fue un espanto cargado de ilegalidades y crímenes o que a mi pueden meterme en la cárcel y freírme a multazos por decir algo tan obvio como que el PSOE y los comunistas se hartaron de matar inocentes hace 85 años o que el socialista Largo Caballero fue el principal responsable de la Guerra Civil de 1936.
Tampoco que es una aberrante manifestación de sectarismo y estupidez y no sólo porque los responsables de esos ‘crímenes franquistas’, que Sánchez y sus socios pretenden perseguir, hace mucho que están muertos.
Estos majaderos extienden sus ‘crímenes franquistas’ hasta 1982, cuando Franco llevaba ya siete años criando malvas, llevaba vigente la Constitución un lustro, Felipe González estaba en La Moncloa y los terroristas de ETA –a los que consideran cosa del pasado y con los que pactan presupuestos y reformas laborales- asesinaban una media de 50 españoles al año.
Eso ya lo hemos hablado otras veces. Lo que toca hoy es hacer propuestas.
Y desde Periodista Digital consideramos imprescindible que, sin mayor dilación, el Ayuntamiento de Madrid incluya ya en sus circuitos turísticos uno por los lugares donde estuvieron enclavadas las chekas, en las que se torturó y masacró a más de 5.000 ciudadanos entre 1936 y 1939.
Como una tournée por las 345 chekas que estuvieron operativas en la capital de España e incluso una gira solo por las 47 que gestionó directamente el PSOE, sería muy larga y hasta tediosa, proponemos al alcalde José Luis Martínez Almeida que el circuito se limite a las más emblemáticas, como la que funcionó en el número 103 de la calle Fuencarral, o a los dos pisos reconvertidos en mazmorras por el socialista García Atadell en la Marqués de Cubas y al matadero de la calle Montera.
Sé que esta iniciativa es polémica y que ya andarán algunos bienaventurados pidiendo calma y sugiriendo que es mejor no remover el asqueroso cieno del pasado, pero yo tengo claro que, si el PSOE y sus socios comunistas quieren memoria histórica, hay darles memoria histórica.
No les voy a repetir que, cuando se aplique, cerrarán un medio de comunicación como Periodista Digital, por sostener que la II República fue un espanto cargado de ilegalidades y crímenes o que a mi pueden meterme en la cárcel y freírme a multazos por decir algo tan obvio como que el PSOE y los comunistas se hartaron de matar inocentes hace 85 años o que el socialista Largo Caballero fue el principal responsable de la Guerra Civil de 1936.
Tampoco que es una aberrante manifestación de sectarismo y estupidez y no sólo porque los responsables de esos ‘crímenes franquistas’, que Sánchez y sus socios pretenden perseguir, hace mucho que están muertos.
Estos majaderos extienden sus ‘crímenes franquistas’ hasta 1982, cuando Franco llevaba ya siete años criando malvas, llevaba vigente la Constitución un lustro, Felipe González estaba en La Moncloa y los terroristas de ETA –a los que consideran cosa del pasado y con los que pactan presupuestos y reformas laborales- asesinaban una media de 50 españoles al año.
Eso ya lo hemos hablado otras veces. Lo que toca hoy es hacer propuestas.
Y desde Periodista Digital consideramos imprescindible que, sin mayor dilación, el Ayuntamiento de Madrid incluya ya en sus circuitos turísticos uno por los lugares donde estuvieron enclavadas las chekas, en las que se torturó y masacró a más de 5.000 ciudadanos entre 1936 y 1939.
Como una tournée por las 345 chekas que estuvieron operativas en la capital de España e incluso una gira solo por las 47 que gestionó directamente el PSOE, sería muy larga y hasta tediosa, proponemos al alcalde José Luis Martínez Almeida que el circuito se limite a las más emblemáticas, como la que funcionó en el número 103 de la calle Fuencarral, o a los dos pisos reconvertidos en mazmorras por el socialista García Atadell en la Marqués de Cubas y al matadero de la calle Montera.
Sé que esta iniciativa es polémica y que ya andarán algunos bienaventurados pidiendo calma y sugiriendo que es mejor no remover el asqueroso cieno del pasado, pero yo tengo claro que, si el PSOE y sus socios comunistas quieren memoria histórica, hay darles memoria histórica.