Ana Bolena y Catalina de Aragón se ven las caras 500 años después
- el año pasado
Hever (R.Unido), 15 feb (EFE).- (Imagen: Enrique Rubio) Su rivalidad marcó la historia de Inglaterra, y hasta la europea. La compleja relación entre Catalina de Aragón y Ana Bolena -las dos primeras esposas del rey Enrique VIII- ha trascendido los siglos, pero su devoción religiosa las vuelve a unir ahora, 500 años después.
En un momento en que las autobiografías de "royals" baten récords de ventas, las series inspiradas en la monarquía triunfan en las plataformas y el país se dispone a coronar a un nuevo rey por vez primera en 70 años, un vistazo a la historia del Reino Unido demuestra que ya todo estaba ahí mucho antes.
La ruptura de la isla con el continente, los cataclismos que un "matrimonio de tres" puede producir o incluso los efectos de una pandemia han marcado la vida reciente de los británicos, pero lo hicieron de igual forma en el siglo XVI a través de estas dos mujeres.
La razón de su reencuentro ahora la tienen dos pequeños libros policromados y anotados en inglés y latín. Son dos "libros de horas", manuscritos ilustrados editados en París en 1527 y que sirvieron a ambas reinas para orar y meditar. Quién sabe si bajo el mismo techo y al mismo tiempo.
RECURSOS DE LOS "LIBROS DE HORAS" EXPUESTOS EN EL CASTILLO DE HEVER.
En un momento en que las autobiografías de "royals" baten récords de ventas, las series inspiradas en la monarquía triunfan en las plataformas y el país se dispone a coronar a un nuevo rey por vez primera en 70 años, un vistazo a la historia del Reino Unido demuestra que ya todo estaba ahí mucho antes.
La ruptura de la isla con el continente, los cataclismos que un "matrimonio de tres" puede producir o incluso los efectos de una pandemia han marcado la vida reciente de los británicos, pero lo hicieron de igual forma en el siglo XVI a través de estas dos mujeres.
La razón de su reencuentro ahora la tienen dos pequeños libros policromados y anotados en inglés y latín. Son dos "libros de horas", manuscritos ilustrados editados en París en 1527 y que sirvieron a ambas reinas para orar y meditar. Quién sabe si bajo el mismo techo y al mismo tiempo.
RECURSOS DE LOS "LIBROS DE HORAS" EXPUESTOS EN EL CASTILLO DE HEVER.