Ratchet & Clank: Una dimensión aparte - Gameplay e impresiones

  • hace 3 años
Ratchet and Clank Una dimensión aparte es el tercer juego exclusivo de PS5, tras Demons Souls Remake y Returnal. Insomniac Games, el estudio detrás de Spider-Man Miles Morales, nos ha dado la oportunidad de ver un nuevo gameplay extendido, con alrededor de una hora de diferentes niveles, y nos ha presentado todos los aspectos del juego, que se ha convertido en uno de los abanderados de lo que podrá ofrecer la nueva consola.
En nuestra impresiones de Ratchet and Clank Una dimensión aparte nos hemos reencontrado con alguno de los elementos esenciales de la saga: el sentido del humor, las secuencias de acción y plataformas, un catálogo de armas loco y un apartado artístico que recuerda a una película de animación, pero ¿cómo ha cambiado Ratchet and Clank en la nueva generación?
El nuevo gameplay arrancaba justo al comienzo del juego. Nuestros héroes, el lombax Ratchet y su compañero mecánico Clank, se encuentran en Megapolis a punto de recibir un homenaje, pese a que llevan años sin hacer nada heroico (ojo, que esto lo dicen los personajes, no es cosa nuestra). Han pasado varios años desde las aventuras vividas en Ratchet and Clank Nexus (ya que el juego de PS4 era un remake del original de 2002).
Los primeros planos de la ciudad ya nos dejan boquiabiertos. Nunca antes habíamos visto un entorno tan amplio, colorido y cargado de detalles. Parece una declaración de intenciones en que nos digan "así es como se debe ver un juego de PS5". La magia para conseguir que la pantalla esté tan cargada de elementos está en el diseño del juego. Rift Apart no se ha desarrollado como un juego tradicional, sino que se ha utilizado la tecnología de los "sandbox".
Esto significa que la consola no carga todo el nivel de una vez (los elementos, las texturas, las fuentes de iluminación) sino que sólo utiliza la memoria para aquello que estamos viendo. Por decirlo de alguna manera, lo que está a nuestras espaldas "desaparece" y no ocupa memoria. Así todos los recursos del hardware se vuelcan sobre lo que aparece en pantalla.