En el más completo hermetismo, Rafael Nadal y Mery Perelló se casaron en Mallorca. Tras 14 años de un idílico romance la pareja dio el "sí" en un recinto amurallado a varios metros de altura sobre el mar Mediterráneo, frente a 350 invitados. Entre ellos, se encontraban los reyes Juan Carlos y Sofía, quienes a diferencia del resto de los asistentes, fueron en su propio auto. Porque como se sabe, Rafa Nadal cuida mucho su privacidad, por lo que tomó una serie de medidas para cumplir su sueño de una boda íntima. Entre las medidas tomadas, destaca que los invitados fueron trasladados en buses y se les pidió que guardaran sus teléfonos móviles en casilleros. Sin embargo, 24 horas después, la pareja compartió un par de fotografías para alegría de todos sus fans.