Podemos no logra frenar la sangría de votos y pasa a ser cuarta fuerza política
  • hace 5 años
Si hay un colectivo que se ha volcado con Unidas Podemos estas elecciones ha sido el del taxi. Y a ellos se ha dirigido Pablo Iglesias nada más salir de la sede del partido. A falta de fiesta oficial de Unidas Podemos, los taxistas sí se han echado a la calle para celebrar que los de Iglesias pueden ser determinante a la hora de formar gobierno. La plana mayor del partido comparecía con un sabor agridulce. Ha perdido ni más ni menos que 29 escaños con respecto a las últimas elecciones, y más de un millón de votos. Iglesias además se ha puesto como objetivo formar un gobierno de coalición con el PSOE. Pero advierte de que eso, de conseguirse, llevará tiempo. Y, con respecto a la cuestión catalana y al modelo territorial, hace este análisis. Sonrisas a pesar de todo. Unidas Podemos habría firmado estos resultados al comienzo de una campaña que se presentaba cuesta arriba.
-Redacción-
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