Los telesillas se ponen en marcha en la estación de Formigal, una imagen que ha cambiado mucho gracias a las últimas nevadas, las pistas se llenan de los primeros esquiadores que no veían clara la temporada y las previsiones parece ser que están de su parte. Más abajo, en el pueblo, en Panticosa nos encontramos este lago completamente congelado, aquí la nieve invita a la desconexión aunque también dificulta la vida a los que cada día circulan por estas carreteras. En el País Vasco la lluvia también ha provocado incidencias, en esta balsa en una carretera a 30 km de Vitoria, quedaba atrapado un autobús de escolares. Los niños y el conductor han tenido que ser rescatados por los bomberos.