Se agrava la crisis diplomática entre Turquía y Holanda

Persona no deseada. A la ministra turca de Asuntos Familiares le comunican esta declaración del Gobierno holandés, que ha desplegado decenas de agentes y helicópteros en la frontera para deportarla a Alemania, desde donde acababa de entrar. Es el segundo caso, agravando la crisis diplomática entre Países Bajos y Turquía. Horas antes, se había denegado el aterrizaje en Roterdam del avión del ministro turco de Exteriores. Las autoridades holandesas no quieren mítines en su territorio para inmigrantes turcos sobre la reforma constitucional que pretende el Gobierno de Ankara y que daría más poderes el presidente islamista Tayip Erdogan. Éste, indignado, respondió donde más duele a los holandeses, tachándoles de fascistas y nazis. El conflicto ha llegado a las calles, acrecentado, con disturbios en ambos países. En Turquía se consideran humillados por su condición de musulmanes y se han organizado protestas ante el consulado holandés en Estambul y la embajada en Ankara, que terminó atacada con huevos. En Roterdam, inmigrantes turcos que comparten esa indignación, se enfrentaron esta madrugada con la policía. La batalla campal acabó con numerosos destrozos y doce detenidos
-Redacción-