En puerto de Barcelona hoy la espera es angustiosa, porque saben que ya ha pasado demasiado tiempo. Los compañeros pescadores de los desaparecidos hoy no han salido a faenar, en señal de duelo. El pesquero hundido está a 170 metros de profundidad. Están trabajando hasta 13 embarcaciones y esta tarde esperan que llegue, desde Coruña, un robot submarino, capaz de bajar hasta 1.000 metros de profundidad. La búsqueda continua y también la investigación para esclarecer qué pasó para que el pesquero se hundiera. El buque ruso salía del puerto y el pesquero entraba. Era una maniobra sencilla y las condiciones de navegación eran favorables. La investigación determinará de quién fue la culpa. Mientras, el mercante ruso sigue inmovilizado en el puerto. Se les ha tomado declaración a sus tres tripulantes. Mañana lo harán los dos supervivientes del pesquero, que ya han recibido el alta médica.