El portugués Cristiano Ronaldo ha explicado a los periodistas las sensaciones que ha vivido al recoger el Balón de Oro 2013 de la FIFA acompañado por su hijo en la ceremonia de entrega celebarada en Zúrich. Al delantero del Real Madrid le ha podido la emoción y las lágrimas han asomado por su rostro. "Son lagrimas sinceras, verdaderas porque el que me conoce sabe el sacrificio y la lucha que me supone el estar a un alto nivel todo el año para competir con los mejores", ha señalado. CR7, ya más tranquilo, ha aprovechado para "las gracias a todos mis compañeros del Real Madrid y de la selección, a mi familia, a todos los que me votaron y a toda la gente que me quiere". "Este trofeo también es de ellos", ha precisado. Por último, el de Madeira ha recordado que el Balón de Oro le va a dar "más motivación para seguir trabajando y luchando cada día". La celebración será "tranquila con  la gente que me quiere, en Madrid y con una copa de champán". "Porque mañana ya tenemos que levantarnos temprano para entrenar", ha puntualizado.