Rusia presiona militarmente en Crimea mientras la comunidad internacional hace uso de la diplomacia para intentar convencer a Putin de que desista de sus acciones. Y en medio mundo, miles de personas se echan a las calles."No a la agresión", gritan los ciudadanos ante la embajada de Ucrania en Riga, en Letonia.En el este de Ucrania, dos manifestaciones bien distintas en dos ciudades del país. En Kharkiv, cientos de manifestantes anti- rusos marcharon por las calles céntricas de la ciudad exigiendo al presidente ruso que se mantenga alejado de los asuntos del país.En Donestk, los manifestantes eran pro-rusos y aseguran que no quiere la guerra, pero tampoco apoyan al nuevo gobierno de Kiev.El jefe del grupo nacionalista radical ucraniano Sector Derecha, ha ordenado la creación de unidades militares en todas las regiones de Ucrania para luchar contra las tropas rusas.Y desde Washington, que ya había suspendido este sábado las reuniones preparatorias del G-8 que se iban a celebrar en territorio ruso, anuncia también que no habrá las reuniones económicas previstas con Moscú. Cientos de personas se dieron cita frente a la embajada rusa, donde han exigido al presidente Putín que deje de hostigar a Ucrania.