Los que se quedan fuera de la financiación son medicamentos que tratan síntomas leves: la tos, los dolores musculares, la diarrea o el estreñimiento. Dice sanidad que se ahorrarán 450 millones de euros, y que así se podrán seguir financiando otros 13.000 fármacos. Síntomas menores, pero muy comunes, por ejemplo entre personas mayores. Ahora tendrán que pagarlos íntegramente. Un ejemplo, este jarabe para la tos, muy recetado para niños. 2.83 a partir del 1 de septiembre, cuando ahora se paga por él 1.13. De la lista se salvan 97 medicamentos, que mantendrán su financiación siempre que el médico confirme que se utilizan para determinadas enfermedades graves o crónicas.