Madeira hace frente a las pérdidas humanas tras el temporal

Primer día de luto oficial decretado por el gobierno portugués en memoria de los fallecidos por el temporal de Madeira. Una sacudida que ha dejado 42 muertos, cifra provisional, porque no se descarta encontrar más víctimas sepultadas. Ahora toca reponerse del caos y la destrucción. El agua pasó por Funchal sin freno ni medida. Una riada descomunal: 114 litros por metro cuadrado en cinco horas y así sin parar casi un día entero. Era como un tsunami, pero al revés puesto que las riberas no podían desaguar tanta agua, tanta roca. Atrapados en ese fin del mundo han muerto 43 personas, pero las tareas de limpieza y desescombro están sacando a la luz más cadáveres. Era lo que se temían autoridades y vecinos. Que en los aparcamientos de dos centros comerciales, auténticos barrizales, puede haber decenas de personas atrapadas. Presas fáciles de la desolación con tan malas noticias los que han sobrevivido hacen frente a la tragedia como pueden. Vidas enteras dedicadas a negocios ahora en ruinas. Decenas de casas irrecuperables que se caen ellas solas a pedazos, como las carreteras, los puentes y mientras 300 familias reciben ayuda del Ejército, porque el agua les llegó a cinco metros de altura.