Una pareja de “viejos millenials” promueve el buen diseño venezolano

  • hace 5 años
Siete al Cubo es más que una tienda o una galería en Caracas. Es un espacio o plataforma impulsada por dos diseñadores, Gabi Valladares y Marcello Botto, quienes además de sus propias creaciones y de ser pareja, se han convertido en uno de los principales promotores de diseños hechas totalmente en Venezuela. Empezaron con algo más de 10 y en la actualidad suman más de una centena.

Son pareja. Estudiaron arquitectura casi en la misma época: ella en la Universidad Simón Bolívar y él en la UCV, pero sólo se vinieron a conocer por Instagram, de allí que Marcelo afirme: “Somos unos viejos millenials”. Al principio cada uno le daba “me gusta” a la imagen del otro hasta que comenzó el flirteo por los comentarios que se dejaban en cada post que iban subiendo a sus respectivas cuentas: @gabipapusa y @bottoprodotto , nombres que identifican también las marcas y diseños de cada uno.

El primer proyecto de diseño conjunto que hicieron fue el de PaPuSÁvila, que son cubos blancos con imágenes del emblemático cerro El Ávila en Caracas; y en el año 2014 abrieron el espacio Siete al Cubo, primero en el Parque Cultural Hacienda La Trinidad y posteriormente se mudaron a un espacio mayor en el Centro de Arte Los Galpones.

Gabi y Marcello no eluden la situación política que afronta Venezuela. Todo lo contrario, participan activamente en las marcha para propiciar un cambio político. Incluso, uno de los diseños de camisetas de Papusa con el lema “El que se cansa pierde” se hizo notorio luego que el dirigente de Voluntad Popular, Leopoldo López, la vistiera al momento que fue detenido en la Plaza Brión en Caracas.

Ambos resaltan como pese a la crisis y a la diáspora de venezolanos, el buen diseño predomina
en la creación de piezas utilitarias (prendas de vestir, bisutería, cuadernos, libretas, tarjetas, adornos o piezas para el hogar, entre otros).

“Se va un diseñador del país pero aparecen otros dos porque está ese foco de luz que ilumina a otras personas y les muestra que sí se pueden hacer las cosas”, sostiene Marcello, mientras que Gabi afirma: “Siete al Cubo es un lugar de encuentro, de inspiración, un espacio donde la gente se mira los ojos y es un ejemplo de la Venezuela que queremos tener”.

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