Rusia insiste en que no tiene nada que ver con la masacre en una escuela en Siria
- hace 8 años
Rusia niega estar detrás de la masacre en una escuela de la región siria de Idleb. El mundo está conmocionado por el ataque, este miércoles, en Has, el peor contra un centro escolar de los 98 que se han registrado en Siria en los dos últimos años. Murieron 35 civiles, entre ellos seis maestros y 22 escolares.
No words to describe the daily atrocities facing children in #Syria https://t.co/5HhzKus6EU pic.twitter.com/OvLkJmoH98— UNICEF (@UNICEF) 28 de octubre de 2016
24 horas después, otros seis menores, incluido un bebé, perdían la vida en dos ataques de los rebeldes sirios en Alepo.
La ONU ha exigido una investigación “inmediata e imparcial” del ataque en Idleb.
Hay quienes piden que el caso sea llevado ante la Corte Penal Internacional por “crímenes de guerra”.
Gordon Brown: “I am calling on the Security Council to… conduct an investigation into what I believe is a war crime.” #Idlib— Gordon & Sarah Brown (@OfficeGSBrown) 27 de octubre de 2016
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos acusa a la aviación rusa de estar detrás de la tragedia.
Washington asegura que sólo Moscú o Damasco pueden ser responsables, ya que los aviones de la coalición “no estaban en la zona”.
El embajador ruso ante la ONU, Vitaly Churkin, negó cualquier responsabilidad en una comparecencia en la que se mostró en contra de imponer sanciones al régimen sirio por el supuesto uso de armas químicas.
“Creemos que no hay pruebas para que se tome cualquier gran medida punitiva, simplemente no existen. Sigamos discutiendo. Sigamos estudiando el informe por favor, lean los comentarios que hice son observaciones técnicas muy, muy graves, que ponen de manifiesto algunas deficiencias en el documento”, dijo Churkin.
El Reino Unido y Francia insisten en que deben imponerse sanciones al régimen de Bachar al Asad. Expertos de la ONU y de la Organización para la Prohibición de Armas Químicas aseguran en un informe que Damasco llevó a cabo al menos tres ataques con armas químicas en 2014 y 2015.
No words to describe the daily atrocities facing children in #Syria https://t.co/5HhzKus6EU pic.twitter.com/OvLkJmoH98— UNICEF (@UNICEF) 28 de octubre de 2016
24 horas después, otros seis menores, incluido un bebé, perdían la vida en dos ataques de los rebeldes sirios en Alepo.
La ONU ha exigido una investigación “inmediata e imparcial” del ataque en Idleb.
Hay quienes piden que el caso sea llevado ante la Corte Penal Internacional por “crímenes de guerra”.
Gordon Brown: “I am calling on the Security Council to… conduct an investigation into what I believe is a war crime.” #Idlib— Gordon & Sarah Brown (@OfficeGSBrown) 27 de octubre de 2016
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos acusa a la aviación rusa de estar detrás de la tragedia.
Washington asegura que sólo Moscú o Damasco pueden ser responsables, ya que los aviones de la coalición “no estaban en la zona”.
El embajador ruso ante la ONU, Vitaly Churkin, negó cualquier responsabilidad en una comparecencia en la que se mostró en contra de imponer sanciones al régimen sirio por el supuesto uso de armas químicas.
“Creemos que no hay pruebas para que se tome cualquier gran medida punitiva, simplemente no existen. Sigamos discutiendo. Sigamos estudiando el informe por favor, lean los comentarios que hice son observaciones técnicas muy, muy graves, que ponen de manifiesto algunas deficiencias en el documento”, dijo Churkin.
El Reino Unido y Francia insisten en que deben imponerse sanciones al régimen de Bachar al Asad. Expertos de la ONU y de la Organización para la Prohibición de Armas Químicas aseguran en un informe que Damasco llevó a cabo al menos tres ataques con armas químicas en 2014 y 2015.