Detrás de la Razón - Miles de muertos en Meca
- hace 9 años
Es demasiado triste, pero sobre todo indignante ver los contrastes que hay en las tragedias humanas.
Por ejemplo, en los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York, murieron alrededor de 3 mil personas, y Estados Unidos hasta se inventó una guerra para clamar justicia, y el mundo estaba consternado.
Esta vez en la tragedia de La Meca, -aunque la naturaleza parece ser diferente-, se murieron más de 4 mil, y la comunidad internacional, cruzada de brazos. No hay esfuerzos para aclarar lo ocurrido ni una observación internacional para darles justicia a más de 4 mil peregrinos muertos.
¿Se le olvidó al Occidente, el amor a la vida y a los derechos humanos? No sólo eso, en el fondo, además, hay preguntas que quedan en el aire y que son necesarias aclarar:
1. ¿Por qué Arabia Saudí, teniendo tanto dinero, tantos recursos, teniendo un avanzado sistema de seguridad en La Meca, no haya podido prever, contener, ser responsable de la organización de un evento tan importante y tan sagrado que terminó en miles de muertos?
2. ¿Por qué si tienen incluso un centro de monitoreo especial de seguridad, de lo más moderno, para cuidar las peregrinaciones y que observa La Meca las 24 horas, hasta este momento han escondido o no han revelado las imágenes de las cámaras de seguridad en el momento de la estampida?
3. ¿Por qué Arabia Saudí ha jugado con el número de muertos, primero insistió en que eran pocos, luego se tardó días en reconocerlo, y aceptó que superaban los 4 mil, y poco después, se echó hacia atrás y regresó a decir que no eran tantos?
4. ¿Por qué la comunidad internacional, la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Europa, Estado Unidos, no se han preocupado en ayudar a saber la verdad de lo que pasó?
5. ¿Por qué parte de la familia real de Arabia Saudí (declaraciones comprobadas, Telegraph) asegura que el rey saudí, Salman bin Abdulaziz Al Saud, no es capaz de gobernar; más, frente a rumores de que los opositores filtraron a un periódico de El Líbano, que fue la mala organización la que causó el desastre, es entonces que esto pudiera ser el resultado de conflictos internos entre la monarquía saudí?
Preguntas suficientes para pensar que hay algo raro en una de las peores tragedias del mundo musulmán, en uno de los lugares más sagrados del planeta, sangre en La Meca.
Por ejemplo, en los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York, murieron alrededor de 3 mil personas, y Estados Unidos hasta se inventó una guerra para clamar justicia, y el mundo estaba consternado.
Esta vez en la tragedia de La Meca, -aunque la naturaleza parece ser diferente-, se murieron más de 4 mil, y la comunidad internacional, cruzada de brazos. No hay esfuerzos para aclarar lo ocurrido ni una observación internacional para darles justicia a más de 4 mil peregrinos muertos.
¿Se le olvidó al Occidente, el amor a la vida y a los derechos humanos? No sólo eso, en el fondo, además, hay preguntas que quedan en el aire y que son necesarias aclarar:
1. ¿Por qué Arabia Saudí, teniendo tanto dinero, tantos recursos, teniendo un avanzado sistema de seguridad en La Meca, no haya podido prever, contener, ser responsable de la organización de un evento tan importante y tan sagrado que terminó en miles de muertos?
2. ¿Por qué si tienen incluso un centro de monitoreo especial de seguridad, de lo más moderno, para cuidar las peregrinaciones y que observa La Meca las 24 horas, hasta este momento han escondido o no han revelado las imágenes de las cámaras de seguridad en el momento de la estampida?
3. ¿Por qué Arabia Saudí ha jugado con el número de muertos, primero insistió en que eran pocos, luego se tardó días en reconocerlo, y aceptó que superaban los 4 mil, y poco después, se echó hacia atrás y regresó a decir que no eran tantos?
4. ¿Por qué la comunidad internacional, la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Europa, Estado Unidos, no se han preocupado en ayudar a saber la verdad de lo que pasó?
5. ¿Por qué parte de la familia real de Arabia Saudí (declaraciones comprobadas, Telegraph) asegura que el rey saudí, Salman bin Abdulaziz Al Saud, no es capaz de gobernar; más, frente a rumores de que los opositores filtraron a un periódico de El Líbano, que fue la mala organización la que causó el desastre, es entonces que esto pudiera ser el resultado de conflictos internos entre la monarquía saudí?
Preguntas suficientes para pensar que hay algo raro en una de las peores tragedias del mundo musulmán, en uno de los lugares más sagrados del planeta, sangre en La Meca.