Salmond deja el liderazgo del partido y el gobierno escocés y duda de las promesas de Cameron
- hace 10 años
El líder independentista escocés Alex Salmond anuncia que dimitirá como presidente de su partido y como primer ministro, tras la derrota en el referéndum para separarse del Reino Unido. En una rueda de prensa, Salmond consideró que era el momento de dar paso a otra generación. Ambas dimisiones se producirán en el congreso del Partido Nacionalista Escocés del 13 al 15 de noviembre que viene.
“Como líder, mi tiempo está cerca de terminar”, afirmó Salmond. “Pero, para Escocia, la campaña continúa y el sueño no morirá nunca”.
Salmond, de 59 años, le deja a su sustituto la tarea de negociar la nueva autonomía escocesa con Londres prometida durante la campaña. Aunque el actual líder del partido aprovechó para avanzar que estas negociaciones no serán fáciles.
“Hoy he hablado con el primer ministro David Cameron y aunque reiteró sus intenciones de proceder a lo que ahora está dibujado, no se compromete a un segundo voto el 27 de marzo para una nueva relación económica con Escocia”, lamentó Salmond. “Esta fue una clara promesa del ex primer ministro laborista Gordon Brown durante la campaña. Cameron dice que un voto como éste no tiene sentido. Sospecho que no puede garantizar el apoyo en las filas conservadoras”.
Aunque Salmond se retira del primer plano político, el 44 por ciento obtenido por el Sí deja una Escocia con más autoridad moral para pedir mayores competencias fiscales, presupuestarias y de cobertura social.
“Como líder, mi tiempo está cerca de terminar”, afirmó Salmond. “Pero, para Escocia, la campaña continúa y el sueño no morirá nunca”.
Salmond, de 59 años, le deja a su sustituto la tarea de negociar la nueva autonomía escocesa con Londres prometida durante la campaña. Aunque el actual líder del partido aprovechó para avanzar que estas negociaciones no serán fáciles.
“Hoy he hablado con el primer ministro David Cameron y aunque reiteró sus intenciones de proceder a lo que ahora está dibujado, no se compromete a un segundo voto el 27 de marzo para una nueva relación económica con Escocia”, lamentó Salmond. “Esta fue una clara promesa del ex primer ministro laborista Gordon Brown durante la campaña. Cameron dice que un voto como éste no tiene sentido. Sospecho que no puede garantizar el apoyo en las filas conservadoras”.
Aunque Salmond se retira del primer plano político, el 44 por ciento obtenido por el Sí deja una Escocia con más autoridad moral para pedir mayores competencias fiscales, presupuestarias y de cobertura social.