Éxtasis de miles de peregrinos ante la doble canonización papal
- hace 10 años
Miles de peregrinos cuentan las horas para asistir a una jornada histórica en el Vaticano, el bautizado como “día de los cuatro papas”.
Juan XXIII y Juan Pablo II serán canonizados este domingo, por el Papa Francisco y Benedicto XVI. Y lo harán ante más de un millón de fieles venidos de todos los rincones del planeta.
Todos quieren ser los primeros en instalarse en la plaza de San Pedro.
“Es como un padre. Yo lo conocía muy bien. Hace 20 años vine a Roma y tomé parte en una audiencia con él. Todos estábamos emocionados”, recuerda Bruno Vecchi, peregrino italiano.
Celebraciones también en Polonia. En Cracovia, la ciudad donde Karol Wojtyla fue arzobispo, sus compatiotas y peregrinos venidos de otros países festejan su canonización. La ceremonia será transmitida en directo en el centro de la ciudad.
“Era un hombre muy especial. Es una leyenda, y es algo muy merecido. Hemos venido de Irlanda a Polonia para estar aquí por su canonización, porque no pudimos ir a Roma”, cuenta Molly Hamilton, peregrina norirlandesa.
Más de 150.000 fieles llegaron a Cracovia desde otros puntos de Polonia y del extranjero. Para ellos, Juan Pablo II siempre fue un santo.
Juan XXIII y Juan Pablo II serán canonizados este domingo, por el Papa Francisco y Benedicto XVI. Y lo harán ante más de un millón de fieles venidos de todos los rincones del planeta.
Todos quieren ser los primeros en instalarse en la plaza de San Pedro.
“Es como un padre. Yo lo conocía muy bien. Hace 20 años vine a Roma y tomé parte en una audiencia con él. Todos estábamos emocionados”, recuerda Bruno Vecchi, peregrino italiano.
Celebraciones también en Polonia. En Cracovia, la ciudad donde Karol Wojtyla fue arzobispo, sus compatiotas y peregrinos venidos de otros países festejan su canonización. La ceremonia será transmitida en directo en el centro de la ciudad.
“Era un hombre muy especial. Es una leyenda, y es algo muy merecido. Hemos venido de Irlanda a Polonia para estar aquí por su canonización, porque no pudimos ir a Roma”, cuenta Molly Hamilton, peregrina norirlandesa.
Más de 150.000 fieles llegaron a Cracovia desde otros puntos de Polonia y del extranjero. Para ellos, Juan Pablo II siempre fue un santo.