Comisario europeo acusado de fraude fiscal

900.000 euros es el dinero que reclama la hacienda belga al comisario europeo de Comercio, Karel De Gucht, acusado de fraude fiscal. La Comisión Europea defiende la presunción de inocencia del político flamenco, que fue antes ministro de Asuntos Exteriores, y dice que este es un asunto privado. El caso está pendiente de resolución. El año pasado otro comisario renunció a su cargo por tráfico de influencias relacionado directamente con sus tareas.

“No se pueden comparar los dos casos. Este asunto no tiene incidencia sobre sus funciones. Ocurrió antes de que fuera nombrado comisario”, asegura Ahrenkilde Hansen, portavoz de la Comisión Europea.

John Dalli, anterior comisario de Sanidad y Consumo, dejó su puesto después de que se conociera un informe de la Oficina Antifraude Europea (OLAF) en el que se aseguraba que el político pedía grandes sumas dinero a las empresas tabacaleras a cambio de influir en las propuestas legislativas europeas.